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La brecha salarial en el mercado laboral brasileño
La desigualdad salarial se ha convertido en uno de los principales indicadores de inequidad en el mercado laboral de Brasil. A pesar de los avances en diversas áreas, las estadísticas revelan que hombres y personas blancas continúan recibiendo salarios más altos que mujeres y personas negras en roles similares. Este fenómeno no solo refleja una injusticia social, sino que también pone de manifiesto la persistencia de prejuicios raciales en el ámbito laboral.
Datos recientes sobre la desigualdad salarial
Un estudio reciente del Cedra (Centro de Estudios y Datos sobre Desigualdades Raciales) ha puesto de relieve que, incluso en profesiones donde predominan los trabajadores negros, los empleados blancos tienden a recibir una compensación significativamente mayor. Por ejemplo, en ocupaciones predominantemente negras, el ingreso promedio de profesionales negros y pardos fue de solo el 74,4% del ingreso de sus contrapartes blancas en 2020. Esta brecha se ha reducido ligeramente en los últimos años, pero sigue siendo alarmante.
Factores que perpetúan la desigualdad
La diferencia salarial no es solo un resultado de la falta de oportunidades, sino que también está profundamente enraizada en el racismo institucional y los sesgos inconscientes. Según Daniele Mattos, cofundadora de la Consultoría Indique, la percepción de que la intelectualidad de las personas blancas es más valiosa que la de las personas negras influye en los procesos de contratación. Esto se traduce en que, a igualdad de calificaciones, un carpintero negro tiene menos probabilidades de ser contratado que uno blanco.
El impacto del networking en la carrera profesional
Otro aspecto crucial que contribuye a esta desigualdad es el networking. Las redes de contactos suelen estar formadas por personas de contextos similares, lo que limita el acceso de los profesionales negros a posiciones de liderazgo y salarios más altos. Además, durante las entrevistas de trabajo, las diferencias en comportamiento, vestimenta y comunicación pueden influir en las decisiones de contratación, perpetuando así la desigualdad.
Un futuro incierto pero esperanzador
A pesar de que la brecha salarial ha disminuido en algunos aspectos, la lucha por la equidad en el mercado laboral brasileño continúa. La necesidad de políticas inclusivas y de un cambio cultural que valore la diversidad es más urgente que nunca. La sociedad debe trabajar unida para erradicar el racismo y garantizar que todos los trabajadores, independientemente de su raza, tengan las mismas oportunidades de éxito.
