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Un hallazgo inesperado en la biodiversidad
En un rincón remoto de las montañas al sur de China, un grupo de investigadores ha realizado un descubrimiento que podría cambiar nuestra comprensión de la biodiversidad en la región. Durante expediciones nocturnas en la provincia de Yunnan, encontraron cuatro ejemplares de una serpiente que nunca antes había sido documentada.
Esta nueva especie, denominada Ovophis zhaoermii, es una víbora de pozo que se oculta entre las sombras, y su veneno podría ser letal.
Características de la Ovophis zhaoermii
La Ovophis zhaoermii fue hallada en la Reserva Natural Provincial de Yuanyang Guanyinshan, a más de 2.400 metros sobre el nivel del mar.
Este lugar, conocido por su clima húmedo y densa vegetación, es un hábitat ideal para especies que han evolucionado en relativo aislamiento. Los investigadores, en su búsqueda por documentar la fauna de la reserva, se encontraron con ejemplares que presentaban características únicas, lo que llevó a la confirmación de que estaban ante un reptil completamente nuevo para la ciencia.
Un homenaje a la ciencia
El nombre de la serpiente, zhaoermii, rinde homenaje al profesor Ermi Zhao, un destacado investigador en el estudio de los reptiles en China. Las fotografías tomadas durante las expediciones muestran ligeras variaciones en la coloración de los ejemplares, lo que sugiere que podrían existir diferencias entre machos y hembras o cambios según su entorno.
Aunque se cree que esta serpiente es venenosa, los investigadores aún no han podido determinar la potencia de su mordedura.
Hábitos y dieta de la nueva víbora
La Ovophis zhaoermii fue encontrada cerca de arroyos, lo que sugiere que caza en ambientes húmedos.
Se estima que su dieta se basa en ranas y otros pequeños animales que habitan en la reserva. Como depredador nocturno, es probable que utilice su veneno para inmovilizar a sus presas antes de engullirlas. Este descubrimiento no solo añade una nueva especie al catálogo de reptiles, sino que también resalta la importancia de la conservación de hábitats como el de Yuanyang Guanyinshan, donde la biodiversidad sigue sorprendiendo a los científicos.