Con la llegada de las elecciones intermedias, la coalición Provincias Unidas, integrada por un grupo de gobernadores de diversas provincias argentinas, tiene el reto de destacar en un panorama político marcado por la polarización. Este frente busca establecerse como una alternativa federal ante las fuerzas predominantes de La Libertad Avanza y Fuerza Patria. El objetivo es claro: consolidar su presencia en el territorio y establecer bases para futuros desafíos políticos.
Los resultados de estas elecciones no solo definirán el futuro de la coalición, sino que también permitirán identificar qué gobernadores son capaces de romper con la polarización en sus regiones. Por ello, se anticipan dos grupos de resultados: aquellos que logran posicionarse en los primeros lugares y aquellos que caen en posiciones menos favorables.
El contexto electoral y los actores clave
La coalición Provincias Unidas está compuesta por seis gobernadores que lideran provincias fundamentales en el interior de Argentina: Claudio Vidal (Santa Cruz), Ignacio Torres (Chubut), Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Carlos Sadir (Jujuy) y Gustavo Sáenz (Salta). Este grupo busca proyectar un discurso que resalte la autonomía provincial frente a la lógica centralista que se impone desde Buenos Aires.
Un caso emblemático es el de Córdoba, donde el gobernador Llaryora, alineado con el peronismo anti-Kirchnerista, apoya a Juan Schiaretti como candidato a diputado nacional. Sin embargo, este camino no será sencillo, ya que La Libertad Avanza también tiene altas expectativas en esta provincia. Para que Llaryora pueda liderar con éxito el bloque de Provincias Unidas hacia 2027, necesitará obtener un triunfo convincente en su propia tierra.
Desafíos en diferentes provincias
En Santa Fe, la vicegobernadora Gisela Scaglia se enfrenta a la tarea de mantener su relevancia en un escenario donde coexisten fuerzas libertarias y la oposición peronista. En Chubut, la situación de Nacho Torres estará en juego, ya que su candidatura se ve desafiada por la boleta de Despertar Chubut. Asimismo, en Jujuy, Sadir intenta capitalizar el apoyo radical que dejó el exgobernador Gerardo Morales.
El panorama es más incierto en las áreas metropolitanas, donde se concentra el 45% del electorado. En la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Buenos Aires, la polarización entre La Libertad Avanza y Fuerza Patria parece dominar la preferencia del votante. Florencio Randazzo lidera la lista de Provincias Unidas en Buenos Aires, mientras que Martín Lousteau y otros candidatos buscan hacer frente a esta situación.
Expectativas y encuestas
Las encuestas recientes indican que la situación es complicada para esta nueva coalición. De acuerdo con Proyección Consultores, Randazzo se encuentra en un 4.8% de intención de voto en la provincia de Buenos Aires, mientras que a nivel nacional, la coalición podría alcanzar un 6.5%. Sin embargo, La Libertad Avanza lidera con un 36.4%, lo que presenta un desafío considerable.
En Córdoba, las encuestas locales sugieren que el apoyo a Schiaretti oscila entre el 24% y el 28%. En Santa Fe, la situación está más reñida, con una contienda cerrada entre Fuerza Patria, Provincias Unidas y La Libertad Avanza. La Ciudad de Buenos Aires también muestra una fuerte preferencia por La Libertad Avanza, lo que hace que la participación de Provincias Unidas sea crucial para lograr un cambio.
Conflictos internos y expectativas hacia el futuro
Detrás de la fachada de unidad, se esconden tensiones internas que podrían afectar el desempeño del bloque. Por ejemplo, el gobernador Gustavo Valdés de Corrientes ha manifestado desavenencias con Lousteau, lo que podría tener repercusiones en sus respectivas campañas. Valdés, que está considerando la presidencia de la UCR, puede ver una oportunidad para posicionarse dependiendo de los resultados en la capital.
Se espera que la coalición de gobernadores obtenga entre 16 y 20 diputados nacionales, una cifra que podría ser decisiva en el Congreso para facilitar o frenar la legislación. Este nuevo bloque intenta aprovechar al máximo esta oportunidad de consolidarse como una fuerza relevante en el panorama político argentino.



