Cristina Fernández de Kirchner queda fuera de la política argentina tras inhabilitación de la Suprema Corte

La política argentina da un giro inesperado. La Suprema Corte del país ha decidido apartar a Cristina Fernández de Kirchner, ex presidenta y figura clave del peronismo, de cualquier futuro electoral. Esta resolución, dictada apenas una semana después de que anunciara su candidatura en las elecciones de medio término, la inhabilita de por vida para ocupar cargos públicos. Un golpe duro para el peronismo, que ha dominado la escena política durante décadas.

Un fallo que sacude al peronismo

La Corte Suprema confirmó la condena de Fernández de Kirchner por corrupción, ratificando una sentencia de seis años de prisión. Los tres jueces que dictaron la sentencia lo hicieron de forma unánime, mientras que los dos asientos vacantes en la Corte permanecen sin ocupar tras los intentos fallidos del presidente Javier Milei de nombrar aliados. A sus 72 años, Fernández de Kirchner tiene cinco días para presentarse a la sentencia final. Aunque sus abogados han solicitado arresto domiciliario, la incertidumbre sobre su futuro político es palpable.

Reacciones y protestas en las calles

La ex presidenta ha denunciado que esta decisión es una maniobra política, argumentando que la élite teme la capacidad del peronismo para ofrecer una alternativa viable si el gobierno de Milei fracasa. En respuesta al fallo, sus seguidores y sindicatos bloquearon carreteras en Buenos Aires, encendiendo neumáticos y haciendo sonar tambores. “Pueden enviarme a la cárcel, pero la gente seguirá teniendo salarios miserables”, afirmó Fernández de Kirchner, instando a su base a movilizarse. Las protestas, aunque dispersas, continúan resonando en la ciudad.

El futuro incierto del peronismo

Fernández de Kirchner había planeado su regreso a la política postulándose para un escaño legislativo en la provincia de Buenos Aires, una jugada que algunos especulaban podría darle inmunidad. Sin embargo, la decisión de la Corte ha desvanecido esa posibilidad. Muchos analistas creen que su candidatura pudo haber acelerado el fallo de la Corte, que ahora deja un vacío en el liderazgo del peronismo.

¿Quién tomará el relevo?

El panorama es incierto. Ninguno de sus aliados más cercanos, incluyendo a su hijo, Máximo Kirchner, parece estar en condiciones de llenar su lugar. A pesar de la polarización que genera, sigue siendo una de las figuras políticas más reconocidas en Argentina, con un 33 por ciento de aprobación, muy por detrás del 50 por ciento que ostenta Milei. “La gran incógnita es cómo podrá mantener el liderazgo del peronismo sin la herramienta que siempre utilizó para ejercer poder: postularse y demostrar su apoyo en las urnas”, comenta Alejandro Catterberg, director de Poliarquía.

Rupturas y apoyos dentro del peronismo

La relación de Fernández de Kirchner con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se ha tensado. Kicillof, ex ministro de economía y protegido de la ex presidenta, desacopló las elecciones provinciales de las nacionales, una estrategia que algunos ven como un intento de fortalecer sus propias posibilidades. En una entrevista reciente, Fernández de Kirchner criticó esta decisión, poniendo en evidencia las fracturas internas del movimiento.

El impacto en el electorado y la economía

Mientras tanto, Milei celebra desde Israel, donde se encuentra en una gira internacional. “La república funciona”, escribió en redes, arremetiendo contra políticos corruptos y periodistas que sugirieron un pacto secreto con Fernández de Kirchner tras un fallido intento legislativo para inhabilitarla. Para muchos inversores, la ex presidenta ha sido una de las fuerzas políticas más desestabilizadoras del país. Su legado incluye controles de capital, grandes déficits y manipulación de datos, que marcaron su presidencia entre 2007 y 2015.

El futuro de Milei y el peronismo

Ahora, el destino del peronismo pende de un hilo. Mariel Fornoni, de Management & Fit, señala que “si Milei logra reactivar la economía y controlar la inflación, el peronismo no tendrá oportunidad. Pero si el gobierno enfrenta dificultades, podría surgir una oportunidad de crecimiento para el peronismo”. La tensión política en Argentina está lejos de resolverse, dejando a la población y a los inversores en un estado de expectativa.

La historia política de Argentina sigue escribiéndose, y lo único seguro es que la inhabilitación de Cristina Fernández de Kirchner marca un nuevo capítulo en esta saga llena de giros y sorpresas.