Crecimiento de la inversión española en México en 2024: análisis profundo

A medida que las dificultades diplomáticas recientes comienzan a desvanecerse, la inversión extranjera directa (IED) de España en México ha experimentado un **incremento notable del 69%** en 2024 en comparación con el año anterior. Este asombroso aumento, impulsado por datos de la Cámara de Comercio Española en México (Camescom), nos lleva a cuestionarnos: ¿qué factores realmente están detrás de este resurgimiento y qué lecciones podemos extraer de esta dinámica?

Desglosando los números

En 2024, México se posicionó como el tercer mayor receptor de inversión española, con un total de **€3.3 mil millones** (aproximadamente **$3.86 mil millones**) invertidos por empresas españolas en el mercado mexicano. Este es el nivel más alto desde 2018, cuando la inversión alcanzó los **€5.5 mil millones ($6.44 mil millones)**. Sin embargo, más allá del mero asombro por las cifras, es crucial profundizar en los sectores que están impulsando este crecimiento.

Más del **72%** de la inversión española en México, es decir, **€2.2 mil millones ($2.58 mil millones)**, se destinó al sector de servicios financieros. Esto plantea una pregunta importante: ¿es sostenible esta concentración en un sector específico? Las empresas españolas tienen una presencia significativa en México, con aproximadamente **2,300** operando y generando más de **500,000 empleos indirectos** en el país. A su vez, México se posiciona como el sexto mayor inversor en España, aportando la mitad de la inversión latinoamericana en el país europeo.

Un clima de inversión favorable, pero con reservas

Una encuesta realizada por Camescom a empresas españolas en México revela que el **75%** de las firmas considera que el clima de inversión es favorable, y un **39%** ha notado mejoras respecto al año anterior. Sin embargo, el **54%** lo percibe como estable, mientras que un **32%** expresa preocupaciones sobre el tipo de cambio. Esto nos lleva a reflexionar: ¿son las percepciones de un clima positivo suficientes para sostener el crecimiento en el largo plazo?

Jordi Peixó Marco, director ejecutivo del Santander en el sector internacional y agronegocios, subraya que a pesar de los conflictos, aranceles y problemas políticos internos en México, el apetito por la inversión en el país se mantiene robusto. Las cifras parecen respaldar esta percepción, lo que indica que hay un compromiso real entre ambos países para seguir adelante.

Lecciones aprendidas y el camino a seguir

La historia reciente de la inversión entre España y México nos brinda varias lecciones importantes. La primera es que incluso en tiempos de tensiones diplomáticas, las relaciones económicas pueden prosperar si hay un interés mutuo. La reunión reciente del embajador español con el presidente del Senado mexicano para reanudar la Comisión Binacional es un paso hacia la normalización de las relaciones, lo que podría abrir más oportunidades en el futuro.

Sin embargo, no se puede ignorar el hecho de que existen desafíos persistentes. La incertidumbre sobre el tipo de cambio y las fluctuaciones económicas globales son aspectos que las empresas deben considerar. La adaptabilidad y la capacidad de las empresas para navegar en un entorno cambiante son cruciales para garantizar la sostenibilidad de sus inversiones.

En conclusión, aunque el crecimiento de la inversión española en México es un signo positivo, es esencial que los inversores y las empresas mantengan una visión crítica y analítica sobre los datos y las tendencias del mercado. Las lecciones aprendidas de la historia y los datos de crecimiento nos guiarán en este camino hacia un futuro más sólido y sostenible.