La reciente destitución de Julieta Makintach, la jueza involucrada en el controvertido juicio por la muerte de Diego Maradona, ha generado un gran revuelo en el ámbito judicial argentino. Este caso, que ha capturado la atención del público debido a la figura icónica de Maradona, se ha visto empañado por la controversia y la gestión de la jueza, lo que llevó a que el juicio se considerara nulo. A continuación, se analizan los detalles de este escándalo y sus repercusiones.
Los hechos
El proceso judicial contra un equipo médico de siete profesionales comenzó tras la muerte de Maradona en. El exfutbolista, considerado uno de los mejores de la historia, falleció a los 60 años debido a un paro cardíaco y edema pulmonar agudo, solo dos semanas después de haber sido operado de un coágulo cerebral. Los fiscales acusaron a los médicos de negligencia en el cuidado que recibió Maradona durante su convalecencia en su hogar.
Las implicaciones de la falta de ética
La situación se complicó para Makintach cuando se descubrió que había sido entrevistada para una miniserie que abordaba el caso, lo que podría haber violado varias normas éticas. Ante esta revelación, la jueza optó por recusarse, pero el daño ya estaba hecho. Después de escuchar a más de 40 testigos, incluyendo a las hijas de Maradona, el tribunal decidió anular el juicio, un hecho que dejó a muchos con un sentimiento de frustración y decepción.
La decisión de destituir a Makintach
Este martes, un panel especial compuesto por jueces, abogados y legisladores de la provincia de Buenos Aires tomó la decisión unánime de destituir a Makintach de su puesto y descalificarla para desempeñar cualquier función judicial en el futuro. Sorprendentemente, la jueza no asistió a la breve audiencia que tuvo lugar en La Plata, donde se encontraban presentes familiares de Maradona, incluyendo a su expareja y su hijo.
Reacciones de la familia de Maradona
La familia de Maradona ha estado luchando durante años por justicia, y esta decisión fue recibida con emociones encontradas. Verónica Ojeda, madre del hijo menor de Maradona, expresó que este fallo representaba “cinco años de lucha” y enfatizó que Makintach debe enfrentar las consecuencias de sus acciones. Por su parte, Gianinna, una de las hijas de Maradona, se mostró aliviada en redes sociales, afirmando que recuperar la fe en el sistema judicial argentino era un “alivio para el corazón”.
Próximos pasos en el juicio
Con el juicio anterior anulado, se ha fijado una nueva fecha para el proceso que se llevará a cabo el 17 de marzo de 2026, donde un nuevo panel de jueces evaluará el caso. Este nuevo juicio implica que varios testigos, que ya habían ofrecido su testimonio, deberán volver a comparecer, incluyendo a las hijas de Maradona. Las acusaciones contra el equipo médico son graves, con penas que podrían alcanzar hasta 25 años de prisión por homicidio con posible intención.
Las acciones de Makintach han suscitado críticas severas sobre la ética judicial en Argentina, y algunos han señalado que su conducta ha menospreciado la credibilidad del sistema legal. La jueza, que en sus declaraciones iniciales se disculpó por su “error”, ahora enfrenta una investigación penal separada por su actuación en este caso, lo que la deja en una posición vulnerable.
La destitución de Julieta Makintach no solo es un hito en el caso de Maradona, sino que también abre un nuevo capítulo en la búsqueda de justicia para el ícono del fútbol argentino. La sociedad sigue atenta a los desarrollos de este juicio, esperando que se tomen decisiones que reflejen un verdadero sentido de justicia y responsabilidad.



