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Conductora de autobús despedida tras 34 años por ser demasiado baja: la ciudad se moviliza en su favor

Conductora de autobús despedida tras 34 años por ser demasiado baja: la ciudad se moviliza en su favor

Una conductora de autobús fue despedida en Manchester (Reino Unido) por ser demasiado baja. La mujer llevaba 34 años trabajando y la ciudad se movilizó por ella.

Conductora de autobús despedida tras 34 años por ser demasiado baja: la ciudad se moviliza en su favor

Un conductor de autobús es despedido después de 34 años por ser demasiado bajo. En 1987 empezó a trabajar en la empresa de transporte público y fue la primera mujer en conducir un autobús en la ciudad. Trabajó muy profesionalmente durante 34 años, hasta que fue absurdamente despedida. Tracey Scholes, de 57 años, recibió un preaviso de unos meses y estará de baja a partir del 1 de febrero. El motivo del despido es su altura. Con 1.52 centímetros de altura, es demasiado baja para conducir los nuevos modelos de autobús que ha adquirido la empresa de transporte público Go North West.

Esta noticia conmocionó por completo a la mujer, que decidió no hacer regalos de Navidad a su familia debido al incierto futuro económico.

«Estoy muy desesperada: conductora de autobús

«He trabajado duro en una empresa en la que la plantilla masculina sigue siendo del 84%, he realizado un trabajo estresante y agotador incluso estando embarazada, he sido acosada y amenazada por muchos pasajeros.

He tenido muchos problemas en este trabajo, pero siempre los he afrontado con valor y determinación. El sindicato me ha acompañado durante estos meses, pero los viejos autobuses que podría conducir ahora son tan pocos que nunca llegaría al número de horas. Soy viuda, tengo tres hijos y tengo que pagar mi hipoteca; ahora estoy realmente desesperada«, dijo Tracey Scholes, que de repente se encontró sin trabajo y sin seguridad tras 34 años de carrera.

La ciudad se moviliza

«Hicimos varias propuestas a la señora Scholes para que cambiara de trabajo dentro de Go North West, pero se negó. No teníamos otra opción», dijo la empresa. Los colegas de Tracey comenzaron inmediatamente a mostrarle su gran solidaridad. Cuando la historia se hizo pública, más de 13.000 ciudadanos firmaron una petición para evitar su despido.

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