Table of Contents
La historia del café en el Acre
La producción de café en el Acre ha experimentado un renacimiento notable en la última década. Aunque los primeros agricultores llegaron en los años 70, la falta de incentivos llevó al abandono de las plantaciones.
Sin embargo, en los últimos años, los agricultores familiares han comenzado a retomar esta tradición, cultivando café de manera sostenible dentro de la reserva extrativista Chico Mendes. Actualmente, el Acre se posiciona como el segundo mayor productor de café en la región Norte de Brasil, con un enfoque en la variedad canéfora, que se adapta mejor a las condiciones climáticas de la región.
Innovaciones en la producción cafetera
La producción de café en el Acre ha pasado de 1.200 hectáreas a mil hectáreas en la actualidad, con un aumento significativo en la productividad. Mientras que antes se producían solo 29 sacas por hectárea, ahora se alcanzan hasta 47 sacas, gracias a técnicas modernas y sostenibles.
Kety Souza, una de las productoras destacadas, enfatiza la importancia de mejorar la producción sin recurrir a la irrigación, aprovechando el régimen de lluvias favorable de la región. Además, su objetivo es recuperar áreas degradadas, aumentando así la oferta de cafés especiales.
El impacto de la Semana Internacional del Café
La Semana Internacional del Café, celebrada en noviembre en Belo Horizonte, ha sido un punto de encuentro crucial para los productores del Acre. Durante este evento, Kety y su esposo Jorge comercializaron su café especial, Raíces de la Floresta, destacando la calidad de su producto y su compromiso con la sostenibilidad.
Este tipo de eventos no solo promueven el café del Acre, sino que también ayudan a los productores a establecer conexiones valiosas con compradores de todo el mundo, lo que es esencial para el crecimiento de la industria cafetera en la región.
Desafíos y oportunidades en la producción sostenible
A pesar de los avances, la producción de café en el Acre enfrenta desafíos. Con solo el 14% de las plantaciones irrigadas, los productores deben adaptarse a las condiciones climáticas y buscar formas innovadoras de maximizar la producción. Sin embargo, la región cuenta con ventajas significativas, como su suelo fértil y un clima propicio para el cultivo de café. La ingeniera agrónoma Michelma Lima destaca que el Acre tiene el potencial de convertirse en un referente en la producción de cafés especiales, aprendiendo de los errores de otros estados como Rondônia.
El futuro del café en el Acre
Con un enfoque en la sostenibilidad y la calidad, los productores de café en el Acre están en una trayectoria ascendente. La colaboración entre los agricultores y el uso de técnicas modernas están ayudando a transformar la industria cafetera de la región. A medida que más productores se suman a esta iniciativa, el Acre tiene la oportunidad de posicionarse como un líder en la producción de café sostenible, ofreciendo productos de alta calidad que respetan el medio ambiente y benefician a las comunidades locales.
