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Un nuevo comienzo para Boca Juniors
La reciente eliminación de Boca Juniors en la Copa Libertadores ante Alianza Lima dejó una herida profunda en el corazón de sus aficionados. Sin embargo, el equipo parece haber encontrado un nuevo rumbo, dejando atrás el dolor y enfocándose en el Torneo Apertura de la Liga Profesional. Con victorias consecutivas sobre Rosario Central y Central Córdoba, el Xeneize comienza a recuperar la confianza que había perdido. Fernando Gago, el director técnico, se encuentra en una situación crítica, ya que su continuidad estuvo en duda tras la derrota por penales. Pero ahora, con el equipo en alza, se respira un aire de optimismo en La Bombonera.
Preparativos para el próximo desafío
El próximo encuentro contra Defensa y Justicia se presenta como una oportunidad crucial para seguir construyendo momentum. Gago ha aprovechado la extensa semana de entrenamientos para ajustar tácticas y preparar a su equipo. Con un horario adelantado a las , el partido se jugará en un ambiente cargado de expectativas, especialmente por la cercanía del clásico de Avellaneda. En las prácticas, Gago ha dividido al equipo en dos, permitiendo que algunos jugadores que no viajaron a Santiago del Estero tengan la oportunidad de demostrar su valía. Entre ellos, Rodrigo Battaglia se destacó como volante central, mientras que otros como Exequiel Zeballos y Lucas Janson se repartieron el ataque.
Lesiones y desafíos en el camino
A pesar de las buenas noticias, no todo es color de rosa para Gago. Cristian Lema, quien regresó tras un largo tiempo de recuperación, terminó la práctica con molestias y se someterá a estudios médicos. Las primeras impresiones sugieren un posible desgarro, lo que podría dejarlo fuera de acción por tres semanas. Además, Kevin Zenón, quien anotó un gol crucial en la serie ante Alianza Lima, también se encuentra en duda debido a una molestia. La situación se complica aún más con las ausencias de Ignacio Miramón y el juvenil Camilo Rey Domenech, ambos con lesiones que los marginan del equipo. A pesar de estos contratiempos, el espíritu de lucha y la determinación de Boca Juniors son más fuertes que nunca, y los aficionados esperan ansiosos el próximo partido.
