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En los últimos años, la percepción de la población argentina sobre su sistema judicial ha mejorado considerablemente. Según el Índice de Confianza en la Justicia (ICJ), elaborado por FORES y la Universidad Torcuato Di Tella, la confianza ha alcanzado un 52,4 puntos en el segundo semestre. Este dato representa un incremento notable en comparación con años anteriores.
Este avance es especialmente significativo, ya que es la primera vez que la confianza supera el promedio histórico registrado entre 2004 y 2011, que se ubicaba en 48,7 puntos. Este fenómeno sugiere que, a pesar de los desafíos que persisten, hay un camino hacia la recuperación de la credibilidad en las instituciones judiciales.
Niveles de confianza en el sistema judicial
El Tribunal Internacional de Justicia (ICJ) ha dado a conocer que, desde que se reanudaron las mediciones tras un paréntesis de doce años, la confianza ha crecido en 4,9 puntos, lo que representa un 10,3% de aumento. Este incremento sostenido en la percepción ciudadana sugiere que los esfuerzos por mejorar el sistema judicial están comenzando a dar frutos.
Componentes del índice de confianza
El índice se compone de dos subcomponentes: el subíndice conductual, que mide la disposición de las personas para recurrir a la justicia, y el subíndice perceptual, que evalúa el funcionamiento del sistema. En este último semestre, el subíndice conductual se sitúa en 74,1 puntos, mientras que el perceptual alcanza 30,8 puntos. Este contraste pone de manifiesto un aspecto clave: aunque hay una alta disposición a buscar justicia, la percepción sobre la eficacia y la imparcialidad del sistema continúa siendo baja.
En comparación con el segundo semestre, donde el subíndice conductual era de 70,1 puntos y el perceptual de 29,3 puntos, se observa un crecimiento en ambas dimensiones. Este avance refuerza una tendencia positiva que no se puede ignorar.
Desafíos y expectativas del sistema judicial
A pesar de los avances, la confianza en la justicia argentina enfrenta retos significativos. Un aspecto crítico es la diferencia entre el uso real del sistema y la percepción de su desempeño. La mayoría de los encuestados, aunque dispuestos a recurrir a la justicia, expresan preocupaciones sobre la imparcialidad, la eficiencia y la honestidad de las instituciones judiciales. ¿Qué está fallando en este sistema que debería proteger nuestros derechos?
Demandas ciudadanas para mejorar la justicia
El informe también resalta las principales demandas de la sociedad para fortalecer la confianza en la justicia. Un 40% de los encuestados menciona la necesidad de reducir la interferencia política y económica, mientras que un 39% pide disminuir las demoras en los juicios. Asimismo, mejorar la formación de jueces y aumentar la transparencia en los procesos judiciales son propuestas que cuentan con el apoyo de un 38% y un 31% de los encuestados, respectivamente.
Estos datos reflejan que la población está atenta a las reformas necesarias y busca un sistema que realmente responda a sus expectativas.
Perspectivas futuras del sistema judicial
La recuperación de la confianza es un camino que no se recorre de la noche a la mañana. Sin embargo, las tendencias observadas en el Índice de Confianza Judicial (ICJ) muestran un cambio progresivo en la relación entre la ciudadanía y la justicia. A medida que se implementan reformas y se abordan las inquietudes planteadas, es probable que esta confianza se fortalezca aún más.
En este contexto, instituciones como la Corte Suprema de Justicia de la Nación, las Facultades de Derecho y los abogados se destacan como las más confiables para la ciudadanía. Esto resalta la necesidad de identificar tanto los puntos fuertes como aquellos aspectos que requieren atención, con el fin de construir un sistema judicial más sólido y efectivo.
El ICJ no solo mide el nivel de confianza, también proporciona una visión sobre qué aspectos son prioritarios para los ciudadanos al momento de mejorar la justicia en Argentina. El fortalecimiento de la relación entre la población y el sistema judicial dependerá de cómo se atiendan estas inquietudes y de los cambios que se implementen en el futuro.
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