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La alarmante situación climática en Argentina
Argentina ha sido identificada como el país con la peor anomalía climática en Sudamérica, según un reciente informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y Climate Central. Durante el periodo de diciembre a febrero, las temperaturas en el país se desviaron casi un grado por encima del promedio de los últimos treinta años, alcanzando un preocupante 0,9 grados.
Este fenómeno no solo afecta a Argentina, sino que también resalta la creciente crisis climática que enfrenta toda la región.
Comparativa con otros países sudamericanos
En el ranking de anomalías climáticas, Argentina se sitúa en la cima, seguida de Venezuela, Paraguay y Ecuador, que reportan desviaciones de 0,7 grados.
Otros países como Guyana y Bolivia también están experimentando temperaturas superiores a la media histórica, con 0,6 grados. Chile y Colombia, aunque en menor medida, también presentan anomalías, lo que indica que el cambio climático es un problema que trasciende fronteras y afecta a toda Sudamérica.
Las ciudades más afectadas
Dentro de Argentina, Córdoba se destaca como la ciudad con la mayor anomalía, alcanzando 1,2 grados por encima del promedio histórico. Otras ciudades como Barquisimeto y Guayaquil también enfrentan situaciones similares, con un aumento de 1 grado.
Buenos Aires, la capital, no se queda atrás, con un incremento de 0,7 grados. Estos cambios en las temperaturas no son solo cifras; representan un aumento en el riesgo para la salud de las poblaciones que viven en estas áreas, con 40 días de condiciones extremas en el trimestre analizado.
Un panorama global preocupante
A nivel mundial, el informe de la OMM revela que 2024 ha sido el año más caluroso registrado, con un aumento de 1,55°C sobre la media. Este incremento supera el récord anterior y subraya la urgencia de abordar el cambio climático. Las concentraciones de gases de efecto invernadero están en niveles alarmantes, y los océanos están más calientes que nunca. Además, la pérdida de glaciares y el aumento del nivel del mar son fenómenos que requieren atención inmediata.
La necesidad de acción colectiva
La presidenta de la OMM, Celeste Saulo, enfatiza que aunque un solo año de temperaturas elevadas no significa que los objetivos del Acuerdo de París sean inalcanzables, es un claro llamado a la acción. La comunidad internacional debe intensificar los esfuerzos para establecer sistemas de alerta temprana y mejorar la resiliencia ante fenómenos climáticos extremos. Actualmente, solo la mitad de los países cuentan con estos sistemas, lo que debe cambiar urgentemente.
