El cementerio británico de Buenos Aires fue el escenario de una emotiva ceremonia el 5 de noviembre a las 11 de la mañana. En este evento se conmemoró el bicentenario de las relaciones diplomáticas entre la República Argentina y el Reino Unido. La ceremonia incluyó la plantación de un plantón de olmo, descendiente de los árboles traídos por la colonia escocesa de Santa Catalina en el siglo XIX. Este gesto simboliza la continuidad y el recuerdo de los lazos perdurables entre ambas naciones.
Desarrollo de la ceremonia
El acto dio inicio con una procesión liderada por el gaitero Brian Gibson, marcando el comienzo de una serie de actividades en la capilla del cementerio. Durante la ceremonia, el obispo Brian Williams ofreció un sermón reflexivo, mientras que el embajador británico, David Cairns, se dirigió a los presentes para resaltar la historia compartida y la amistad continua entre ambos países.
Palabras de los oradores
John Hunter BEM, presidente del Cementerio, también tuvo su momento para compartir reflexiones y coordinar la plantación conmemorativa. La directora general de Culto del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Pilar Bosca, subrayó la importancia cívica y cultural del evento. Para cerrar la ceremonia, Douglas Robertson de la Iglesia Presbiteriana ofreció una bendición, sellando el acto con un sentido de unidad y respeto entre todos los asistentes.
Contexto histórico
Este significativo evento conmemora el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación de 1825. En particular, se destaca el artículo 12, que garantizaba la libertad religiosa y los derechos de sepultura para los súbditos británicos en las Provincias Unidas del Río de la Plata. Esta disposición fue clave para la fundación de la colonia escocesa de Santa Catalina, un asentamiento que abarcaba unas 6,500 hectáreas, extendiéndose desde Llavallol hasta el Riachuelo.
Contribuciones notables
Entre las personalidades más destacadas de esta colonia se encuentra John Tweedie, un jardinero escocés y explorador botánico vinculado al Jardín Botánico Real de Edimburgo. Sus trabajos de reforestación y paisajismo aún perduran en el bosque de Santa Catalina en Llavallol. Este legado verde no solo embellece la región, sino que también simboliza los lazos históricos entre Argentina y el Reino Unido.
La plantación simbólica del olmo
El olmo, que fue recientemente plantado en el cementerio, es un descendiente directo de los árboles originales de Santa Catalina. Esta iniciativa fue impulsada por el Dr. Alberto De Magistris, profesor de Botánica en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, cuya ubicación en el pasado formó parte de la propiedad de Santa Catalina.
Según los estatutos del Cementerio, el embajador británico en funciones actúa como asociado honorario de la institución. Durante la ceremonia, los miembros de la Junta Directiva del Cementerio, junto a su personal, dieron una cálida bienvenida al embajador Cairns, deseándole una estancia fructífera en Argentina.
Momentos ceremoniales y celebración
Durante la plantación, el embajador Cairns y el señor Hunter usaron una pala ceremonial adornada con los colores de las banderas argentina y británica para dar inicio a la actividad. Este gesto marcó un momento simbólico de conexión entre ambas naciones.
El señor Hunter también extendió una invitación a representantes de organizaciones municipales, religiosas y comunitarias, quienes se unieron al acto, simbolizando la unión y el respeto entre las culturas. Este encuentro resalta la importancia de la colaboración y el entendimiento mutuo.
La ceremonia finalizó con una recepción donde se ofreció champán. Durante este momento, se realizó un brindis por los 200 años de relaciones diplomáticas, expresando el deseo de mantener vínculos constructivos durante otros 200 años más. Este evento no solo celebra el pasado, sino que también mira hacia un futuro prometedor de cooperación y amistad.



